Una de estas semanas, una madre pasó por la tienda y dejó un comentario que nos resonó y hoy lo compartimos con vosotros.
Nos dijo que todavía tiene juguetes de su primer hijo que nos compró y que todavía los usa con su segundo hijo, ya que siguen siendo fantásticos . ¡Nos encanta saber que tus hijos también son felices y se benefician de juguetes que conectan con la naturaleza (al fin y al cabo, están hechos de madera !) ¡y que duran generaciones!
También compartió que, cuando va de compras y lleva a su hijo mayor, casi siempre compra cosas por impulso , porque quiere “algo”, pero nunca sabe qué.
A nosotros también nos ha pasado a nivel personal, comprar juguetes que en determinadas tiendas tienen una pinta estupenda, o simplemente con un precio simbólico, ¡pero que acaban estropeándose a los pocos minutos de uso ! Es una situación frustrante y, además, poco sostenible. Desafortunadamente, es dinero en la basura 😔
Los juguetes desechables no sólo representan un desperdicio de recursos, sino que también pueden decepcionar rápidamente a nuestros hijos, dejando rápidamente que los momentos de euforia y felicidad den paso a lágrimas tristes y frustraciones. Desafortunadamente, este tipo de juguete lidera las ventas. Sin embargo, en Gotu ¡TODO está filtrado! Creemos que los niños merecen lo mejor que podamos darles, por eso traemos lo que, de lo que hemos probado y comprobado, ¡también consideramos lo mejor!
Es hora de considerar opciones más conscientes. Elegir juguetes duraderos y de calidad significa invertir en piezas que puedan pasar de un niño a otro o incluso compartirse con otras familias. Los juguetes de madera son conocidos por su durabilidad y atemporalidad. Pueden soportar muchos años de juego y seguir disfrutándose durante generaciones.
Además, a la hora de elegir juguetes de calidad, pensamos en su ciclo de vida completo. A menudo, estos juguetes pueden incluso venderse cuando ya no son necesarios, sin una pérdida importante de valor. Esta práctica no sólo ayuda a reducir el desperdicio sino que también permite que otros se beneficien de estos juguetes.
Promovamos juntos opciones más conscientes y sostenibles para nuestras familias. Los pequeños gestos que hacemos hoy pueden tener un impacto positivo duradero en las vidas de nuestros hijos y en el planeta que compartimos.
Sabemos bien que vivimos en una era donde la variedad de opciones y la vertiginosa velocidad de la vida tecnológica son adictivas. Es tentador estar constantemente conectado, en las redes sociales, sabiendo qué pasa, cuál es el mejor producto, absorto en las últimas novedades o distracciones que nos ofrece la tecnología.
Sin embargo, es fundamental que intentemos rescatar momentos de calma para nosotros y nuestros hijos.
En este mundo ajetreado, donde la abundancia de opciones a menudo nos distrae, es importante reconocer los beneficios de reducir el ritmo. Dedicar un tiempo a momentos de tranquilidad y libres de estímulos digitales puede aportar una serie de beneficios al bienestar emocional y mental de nuestras familias.
Compartimos contigo algunas técnicas para rescatar esos momentos de calma :
Desconecta regularmente: Establece periodos durante el día o la semana para apagar los dispositivos electrónicos. Utilice este tiempo para actividades tranquilas, como leer un libro , jugar al aire libre o simplemente hablar .
Cree espacios libres de tecnología en el hogar: Designe áreas del hogar donde no se permitan dispositivos. Por ejemplo, la mesa del comedor puede ser un lugar sagrado para conversaciones familiares sin distracciones tecnológicas.
Promover el juego tradicional: Redescubrir los juegos y juegos tradicionales , los juegos de mesa , las artes y manualidades , o simplemente explorar la naturaleza son actividades que pueden inspirar momentos de tranquilidad y conexión.
Practica el arte de la atención plena: introduce técnicas sencillas de atención plena y meditación en tu rutina diaria. Estas prácticas ayudan a calmar la mente y apreciar el momento presente.
Establece límites saludables: Establece límites claros respecto al tiempo que pasas frente a las pantallas. Crea reglas que equilibren el uso de la tecnología con otras actividades más relajantes e interactivas.
Rescatando momentos de calma y relajación, estamos contribuyendo a un estilo de vida más equilibrado y saludable para toda la familia. Recordemos siempre que, incluso en una era de alta tecnología, la paz interior y la conexión humana siguen siendo valores fundamentales que debemos cultivar.
